Zona de recepción
Este espacio es una superficie que está correctamente impermeabilizada y es tan amplia como para acoger los diferentes tipos de primeras materias que nos llegan constantemente. Es en esta etapa cuando se analiza y se clasifica la materia prima.
Zona de fermentación
Aquí se sitúan las materias primas mezcladas de forma homogénea y se produce el proceso de transformación, propiamente conocido como “compostaje”. Puesto que la materia orgánica se degrada de forma natural, llegando a una temperatura superior a 70 °C, nuestras instalaciones son las óptimas para llevar a cabo todo esto de manera controlada y sin correr ningún riesgo
Zona de maduración
Es una zona impermeabilizada con el fin de impedir que se eche a perder el producto. En este lugar se deja reposar el compuesto y se remueve de forma periódica para oxigenar la mezcla y evitar que los microorganismos beneficiosos para los cultivos y los suelos se mueran por falta de oxígeno.
Zona de producto acabado
En esta instalación se deposita el producto final. Aquí nuestro compuesto ya se encuentra estabilizado y cribado. Una de las ventajas de este producto es que su almacenamiento y transporte no suponen ningún riesgo ni por la salud ni para el medio ambiente.